En Madrid, durante el verano de 2011, la crisis económica ha agitado a la sociedad, provocando la llegada del movimiento 15-M. Además, miles de peregrinos llegan a la calurosa capital para esperar al Papa. En este contexto los policías Alfaro y Velarde deben atrapar a un presunto asesino de manera discreta. Pero la presión y la carrera contra reloj les hará darse cuenta de una verdad terrible: quizá ninguno de los dos es tan distintos del criminal al que persiguen.