Esta semana hemos conocido las nominaciones a los Oscar de
este año. No ha habido demasiadas sorpresas. Penélope Cruz vuelve a estar nominada, está claro que esta chica le
debe mucho al implacable productor de métodos cuestionables, Harvey Weinstein. Por cierto que la Miramax sin
sus fundadores, los hermanos Weinstein, se ha ido a pique, una lástima porque era una
gran productora, aunque quizá ahora la gran productora sea The Weinstein Company, y ese sea precisamente
el problema de Miramax. De momento esta joven productora ya ha vuelto a colarse en los
Oscar (como en años anteriores), especialmente con los Malditos Bastardos de Tarantino.
Pero volviendo a Penélope, lo cierto es que me parece una gran actriz, y su
Oscar del año pasado merecido, sin embargo, en Nine no se puede decir que tenga la oportunidad de lucirse
demasiado (interpretativamente hablando, se entiende). En cualquier caso me alegro por ella, está enderezando su carrera.
Este año tenemos nada menos que diez nominadas a mejor
película. Excesivo. Dos de ellas aún no han llegado a nuestras carteleras (An education y The Blind Side). De las ocho restantes, dos son mediocres, con
notables defectos: Precious con su dramatismo
fácil y Distrito 9, una ciencia
ficción lista para calentar en el microondas. Después tenemos Avatar, claro
está, la sensación de la temporada y ya oficialmente la película que más ha
recaudado de la historia, una marca que ya no es un misterio para James Cameron. A mi parecer, una
película correcta, con más aspectos positivos que negativos, y con unas excelentes
propiedades técnicas, absolutamente punteras. En todo caso, no es una de las diez
mejores películas del año. Ni quizá de las veinte mejores. Sin embargo, al
igual que ha repetido marca económica, Cameron puede repetir su gesta de
Titanic en los Oscar.
Las cinco películas restantes sí son cine de gran calidad.
En tierra hostil es una excelente película bélica, que si bien cuenta con
algunos trucos fáciles en su guión, contribuye al perfeccionamiento de la
estética documental al servicio del thriller y de la crítica social en el
ámbito de la ficción. No me importaría que Kathryn
Bigellow se llevara el oscar, en lugar de su exmarido (Cameron). Dirige
esta película con inteligencia, potencia y muy buena mano. Sería la primera
mujer en hacerse con la estatuilla, creo que eso juega a su favor, este tipo de
hazañas gustan. Up es una muy buena
película de animación, a pesar de sus horribles concesiones a la taquilla.
Confío en que no gane, pero me parece correcto que sea honrada con una
nominación. Otro triunfo de Pixar. También me parece excelente que se tenga en
cuenta a los hermanos Coen a pesar
de su huída del cine comercial con Un
tipo serio. No es una de sus mejores películas pero tiene muy buen nivel. Up in the air es una buena representante
del cine indie, bastante mejor que Precious.
Mi favorita, de entre estas diez, la película de Tarantino, Malditos Bastardos. Puede ser un buen
momento para apoyarle con un Oscar y que siga por el buen camino, alejado de
sus experimentos en B. En cuanto a la película de habla no inglesa, dos
excelentes títulos que ya he podido ver, La
cinta blanca y El secreto de sus ojos,
y otra a la que tengo ganas, Un profeta.
Sin sorpresas. Desde luego, la película de Trueba no estaba a la altura ni de
lejos, ha tenido tiempos mejores (y seguramente los tendrá).
Por supuesto echo de menos algunas nominaciones. 500 días juntos debería estar entre las
nominadas a mejor película, así como Moon.
Michael Mann merece estar
considerado entre los mejores directores (por encima de algunos que sí están)
por su innovación con Enemigos públicos.
En cualquier caso, hay que reconocer que tampoco este ha sido un año de grandes
títulos. Esa será la mejor baza de Cameron.
Por último, comentar algo que me ha encandilado, que Harry Potter y el misterio del príncipe esté nominada a mejor fotografía. Todo un acierto (un atrevido acierto) que
ojalá ganara, aunque es difícil observando a sus potentes contrincantes.
Hablo brevemente de Sundance. Como había prometido, el festival
independiente toma rumbo a una independencia mucho mayor, cosa lógica viendo
algunos títulos nominados al Oscar. Sundance debe diferenciarse o no tendrá
demasiado sentido como festival temático. Un par de premios para Winter's Bone que promete ser un dramón
bien ejecutado, cine negro y drama en la América profunda y fría. La
australiana Animal Kingdom gana a
nivel internacional con al menos un protagonista reconocible, Guy Pearce. Parece que Buried del
español Rodrigo Cortés ha causado
sensación. Una película rodada en Barcelona, ambientada nada menos que en Irak.
Promete. No habrá que quitar ojo a este director.