Cannes: Y llegó Cronenberg

El sistema de castas y prioridades imperante en el Festival de Cannes en lo referente a los acreditados de prensa, me había impedido poder ver la nueva locura de Cronenberg hace unos días. Una vez repescada, hoy toca  la crónica de Maps to the Stars junto a unos breves comentarios sobre algunas de las películas más interesantes vistas hasta ahora fuera de concurso.

Cuentan que hasta Maps to the Stars David Cronenberg nunca había rodado en Hollywood. Con Canadá y Europa le bastaba. Y tras ver la película lo que queda claro es que Cronenberg no fue a Hollywood a hacer amigos. Maps to the Stars es una sátira ácida y delirante del Hollywood actual, de su afición por las secuelas absurdas, su obsesión por las recaudaciones, sus estrellas y su entorno. Sobre todo lo que rodea la industria del entretenimiento. Tan libre e imprevisible, como magnética para el aficionado al cine. La película se centra en la familia Weiss, compuesta por un gurú televisivo de la autoayuda, su hijo de 13 años estrella de cine recién rehabilitado, la abnegada esposa y su hija mayor (estupenda Mia Wasikowska) que acaba de salir de un sanatorio mental en el que la ingresaron y que llega desde Florida dispuesta a armarla. Junto a ellos una actriz madura (Julianne Moore tan fantástica como siempre) que quiere conseguir el papel que ya interpretó su madre hace 30 años en el remake que se está preparando y un chófer bastante perdido (Robert Pattinson) que pasaba por allí.

A partir de ahí, el guión de Bruce Wagner plantea un argumento estrambótico propio del culebrón más desbocado que parece reírse de sí mismo, a la vez que critica la capacidad de Hollywood para generarlos. Las continuas referencias de Maps to the Stars a noticias, series y películas recientes la enganchan a la actualidad.

13 más en corto

En el festival de Cannes no sólo se vive de la sección a concurso. Existen también las sesiones especiales, las de medianoche, Un Certain Regard, la Quincena de Realizadores, la Semana de la Crítica que hacen del festival un monstruo completamente inabarcable. Aquí van  brevemente comentadas algunas de las películas más destacadas vistas hasta el momento en las secciones paralelas.

The Salt of the Earth de Wim Wenders y Juliano Ribeiro Salgado. Impresionante documental basado en las fotos de Sebastiao Salgado, padre del codirector, que repasa algunas de las mayores desgracias ocurridas en el mundo los últimos 40 años (Ruanda, Etiopía, Kuwait, Yugoslavia…) y nos descubre algunos paraísos perdidos. El único pero, un tufillo de publirreportaje en la parte referida a la recuperación de la granja familiar en Brasil. Cine político y ecológico de muchos kilates. Presentada en Un Certain Regard.

Turist (Force Majeure) de Ruben Östlund. Una de las sorpresas de esta edición. Las vacaciones familiares de una familia aparentemente ideal dan lugar a un ácido y divertido análisis del comportamiento humano, de las relaciones familiares y de los roles dentro del matrimonio. Presentada en Un Certain Regard.

Bande de Filles de Céline Sciamma. La directora de Tomboy vuelve a los temas de su anterior película, la necesidad de formar parte del grupo y el descubrimiento personal y sexual de una joven, pero esta vez de forma más ambiciosa, con una lectura más universal y protagonizada por una joven de 16 años de los suburbios de Paris. Muy cuidada visualmente, destaca por la utilización de la música para crear la atmósfera de algunas de sus secuencias, si bien narrativamente flojea en algunos momentos.

Coming Home de Zhang Yimou con Gong Li. Melodramón con aroma (según algunos tufo) clásico con el claro objetivo de hacer llorar a los espectadores. Con muchos lo consigue. Bellísima fotografía. Destaca una magnífica secuencia en una estación que es un prodigio de planificación para conseguir tensión. Presentada fuera de concurso.

Amour Fou de Jessica Hausner. Austeridad en la planificación, en los decorados y en las interpretaciones al servicio de una comedia romántica. Pero romántica en el sentido del movimiento alemán de finales del XVIII. Nada que ver con la definición de Hollywood. Presentada en Un Certain Regard.

National Gallery de Frederick Wiseman. El veterano director norteamericano planta su mirada en el museo de Londres y sus trabajadores y firma uno de sus mejores filmes de los últimos años. Lo mejor: cómo atrapa las miradas de los visitantes al museo que miran los cuadros. Voyeurismo puro. Presentado en la Quincena de Realizadores.

The Salvation de Kristian Levring con Mads Mikelsen y Eva Green. Alocado western danés con planificación pasadísima de rosca, fotografía llena de filtros que acomplejan al instagram y un argumento rocambolesco. El espíritu del cómic más disparatado ideal para una sesión de medianoche.

Red Army de Gabe Polsky. Resultón documental sobre los jugadores del equipo de hockey sobre hielo ruso de los 80, utilizados como herramienta de propaganda en plena guerra fría y que acabaron jugando en los grandes equipos norteamericanos. Presentada en sesión especial.

The Disappearance of Eleanor Rigby con Jessica Chastain y James McAvoy. Fusión de las dos películas que se presentaron en Toronto contando la misma historia desde los dos puntos de vista de sus protagonistas, ejecutada por Harvey Weinstein a mayor gloria de Jessica Chastain que desde ya se convierte en candidata al Oscar. A la película se le notan demasiado las costuras y las hechuras de película ‘para los Oscar’. Presentada en Un Certain Regard.

Bird People de Pascale Ferran con Anaïs Demoustier y Josh Charles. Sorprendente propuesta de la directora de Lady Chatterley que cuenta en una película dos historias cuyo principal nexo común es que transcurren en el Hotel Hilton del aeropuerto Charles de Gaulle de Paris. En la primera, un alto ejecutivo de una empresa estadounidense decide cambiar de vida para ser libre como un pájaro. En la segunda, una limpiadora del hotel… (no se puede decir nada ya que la directora ha pedido expresamente que no se revele nada). Cine sorprendente, libre y arriesgado que funciona. Presentada en Un Certain Regard.

Jauja de Lisandro Alonso con Viggo Mortensen. El director de Liverpool se mete en una superproducción (para su estándar) de época en la que hay más diálogo que en todas sus películas anteriores juntas. Un inicio cadencioso va preparando poco a poco al espectador más paciente para un último acto mágico y fascinante. Presentada en Un Certain Regard.

Feher Isten de Kornel Mundruczo. Una de las mayores bizarradas de esta edición. Lo que de primeras parece una película familiar de perrito perdido en la ciudad, se acaba convirtiendo en una película propia para festivales de cine fantástico y terror. Estimulante mezcla de géneros. Presentada en Un Certain Regard.

The Rover de David Michôd con Guy Pearce y Robert Pattinson. El director de Animal Kingdom se pasa al cine apocalíptico, seco y violento, con buen pulso narrativo y un sorprendente Robert Pattinson.