Samuel L. Jackson entra con su director Renny Harlin. Es una de las estrellas más esperadas pero no hay un especial despliegue de prensa ni hay necesidad de una cuerda separadora como con Richard Gere. La rueda de prensa dura poco, ellos no tienen más tiempo, luego tendrán que ir al Velódromo. La velocidad a la que habla Jackson se compensa con el tono calmado de Harlin.
Hablan de la voz del actor. Él explica que haciendo teatro tuvo que trabajar mucho la voz, asegurarse de que en la última fila podían oírle. Habla de su trabajo, dice estar acostumbrado a ver en su casa a su familia trabajar y por eso para él fue algo natural, levantarse pronto para ensayar y trabajar duro. Sin embargo asegura que no limpia en casa (en alusión al argumento de la película).
Esta es la tercera vez que director y actor trabajan juntos, según se comenta, y ambos dicen estar muy contentos. De hecho, unos comentarios y miradas cómplice entre ambos dan a entender que podrían volver a hacerlo en breve. El director hace un símil con una primera cita, al principio no sabes lo que te vas a encontrar, pero las siguientes citas ya son más fáciles. Por eso, explica, es maravilloso trabajar con los mismos actores, si son grandes como Jackson.
El actor también habla del director. “Renny sabe que el cine no es cirugía”, refiriéndose a que lo que hacen no es tan importante, pueden hacerlo divertido. “Nos divertimos, esperemos que ustedes también”. El actor comenta que él suele llevar ideas al rodaje, y como Harlin ya sabe como trabaja él, todo funciona.
Se le acusa a Jackson de hacer sólo papeles de acción. Él se defiende “¿Cuántas películas mías has visto?” y cita algunas que no son de acción, pero lo cierto es que le cuesta un poco enumerarlas. “Hago mucha acción porque me gusta y paga las facturas”. Pero también dice hacer otras y poder elegir. Asegura que le llegan 8 guiones a la semana, de los cuales debe haber 3 al mes que estén bien. Aquí es donde hacen el guiño a una posible colaboración.
“Hollywood hace cosas igual a otras que ya han dado dinero antes”. Habla de algunos proyectos y dice que hará otra película de acción con su mismo papel de siempre, y luego otra con el mismo personaje… “Quizás tengas razón” termina concluyendo.
¿Hay igualdad en Hollywood para blancos y negros? Jackson no duda: “Honestamente, pues no”. Explica lo difícil que está también para los latinos. Dice que es difícil que los actores negros transciendan fronteras y los estudios piensan a nivel mundial. Sólo unos pocos actores pueden conseguirlo y cita a Denzel Washington, Will Smith “por supuesto, Will Smith, reitera”, Eddie Murphy. Se para especialmente en Forest Whitaker, dice que su película puede que no haya dado mucho dinero pero el Óscar es un reconocimiento importante que ayuda a trabar con otros directores.
Harlin coincide con el actor y añade que las películas que se hacen en Estados Unidos dirigidas al público afroamericano, no son precisamente de la mejor calidad, y suelen tener bajo presupuesto. Así mismo, los videos de raperos y demás, dice, refuerzan una idea de baja calidad que no se corresponde con la realidad.
Para la película se documentaron y Samuel L. Jackson estuvo trabajando su papel con verdaderos “limpiadores”. Eso sí, confiesan no haber sido demasiado fieles a la realidad para conseguir una mayor fuerza visual.
Al preguntarles si saben lo que les espera en el Velódromo, Jackson se muestra asustado, dice que sabe lo que es un Velódromo pero no qué más debe saber. Renny Harlin bromea: yo llevo la bici. Luego en serio cuenta que oyó decir a Oliver Stone que sólo viene a San Sebastián si proyectan su película en el Velódromo.
Hace su aparición un tema que parece tabú. Se les pregunta por una supuesta huelga de actores que va a haber en Hollywood. El actor reponde “¿Huelga? ¿Por qué me preguntan a mí?” Renny Harlin afirma con toda su sobriedad nórdica “La huelga se va a llevar a cabo”. Pero no quiere decir más, Jackson le incita “¡Venga! Hazles un resumen". Harlin parece que va a empezar y al final dice “Me da miedo”. El propio actor nos cuenta un poco, está relacionado con las nuevas tecnologías, que un producto pueda llegar al usuario final sin que el creador reciba nada por ello… no quieren decir expresamente la palabra piratería. “Se trata de una cuestión de dinero”.
Harlin apoya: “Eso iba a decir… pero no me citen”. “A mí tampoco” añade Jackson.
La rueda de prensa termina pronto; tienen prisa. Aunque al actor le da tiempo a firmar algunas cosas, como por ejemplo un poster de Pulp Fiction.