El nuevo film de Rachid Bouchareb, realizador que ya sabe lo que supone conseguir figurar en el palmarés de Cannes con alguno de sus títulos anteriores, ha llevado al certamen galo la enésima polémica, algo que de tan habitual empieza a perder todo efecto o credibilidad.
Esta vez las quejas y el barullo general llegan por el retrato que Bouchareb ofrece en Hors-la-loi de los años en que Argelia estuvo bajo poder colonial de Francia. Algunos sectores se han quejado por la imagen ofrecida, mientras que en lo estrictamente cinematográfico la película ha sido muy aplaudida. No son pocos los que la sitúan como seria candidata a la Palma de Oro.
Por su parte, Bouchareb se ha quejado amargamente en rueda de prensa por los ataques de algunos sectores hacia la película, que él ha preferido presentar como un "thriller" político. "La intención de la película es abrir un debate, no crear enfrentamiento", asegura el realizador.
El festival entra ya en su recta final, y esta noche es el turno de una de las películas más esperadas: La segunda parte de Quemado por el sol, de Nikita Mikhalkov. Mañana sabremos quién se lleva el gato al agua, o lo que es lo mismo, qué película gana la codiciada Palma de Oro.