Hoy, 26 de septiembre, es el último día del festival. Quienes tengan la sesión a las doce de la noche serán los últimos testigos de la fiesta del cine donostiarra. Han sido nueve días de mucho trabajo, de una cobertura precrítica que espero haya servido para manteneros al corriente de todo lo que acontecía en la capital guipuzcoana día a día, casi al instante, ofreciendo un diario, fotografías, críticas, todo lo más fresco en vuestras pantallas. Espero vuestros mensajes en el foro. Qué os ha gustado. Que no os ha gustado. Qué es lo que más. Y lo que menos. Todas esas cosas.
El día de hoy ha sido muy especial. Además de ser el último, el precrítico William Munny ha llegado a Donostia. Ha compartido con Sherlock, Rómulo, Frenchy la asidua a precríticas, amigos y un servidor la sesión de Mother and Child en el Auditorio Kursaal. Habrá postcrítica. La rueda de prensa de la misma película arrastraba mucho glamour ya que la actriz protagonista Naomi Watts llegó ayer a San Sebastián. He de decir que su actitud profesional hacia los medios ha dejado mucho que desear. Apenas miraba de frente, apenas sonreía, muy forzada. Entiendo que estará hasta arriba de los fotógrafos y de los periodistas. Pero que nos comprenda. Por eso, me he esforzado y he conseguido una foto de la británica mirando más o menos al frente.
Por cierto, una pareja se ha casado hoy sábado y se han ido a sacar fotos de novios en la alfombra roja.
Al mediodía, un pintxo y refresco. Después, comemos Munny, Rómulo, Sherlock y yo en un pequeño restaurante de la parte vieja. Nuestras charlas a lo largo del día íban siempre entorno al Palmarés Oficial que se comunicaría a primera hora de la tarde. Nos lo olíamos, sabíamos que íba haber pucherazo, se intuía. El buen cine íba a ser sacrificado por intereses varios. Los actores que llevan décadas trabajando se irían de vacío. Los premios íban a parar a manos desconocidos, a manos que no les pertenecían. Este era el año del peor jurado en muchos años. El jurado con menos rigor cinematográfico en muchos años.
Todavía no sé en base a qué han determinado ciertos premios. Considero que un palmarés así no es serio y en cierta manera no se ha premiado nada, se ha regalado. Voy a comentar punto por punto cada uno de los premios:
1- La mejor película ha ido a parar a China. La película de Lu Chuan City of life and death ha sido la ganadora. Personalmente, no me parece una decisión desacertada. Es una gran película de cinco estrellas, sin duda. Aunque El secreto de sus ojos tenía que haberse llevado la Concha de Oro a la mejor película. Crítica y público defendían esta opción. Felicidades al equipo de la película china. El pucherazo no está aquí.
2-El Premio Especial del Jurado ha viajado a Francia. La película Le refuge de François Ozon se lo ha llevado. Esta gran película se merecía algún premio y le han tocado las migajas del palmarés. Merecía mucho más. Se ha llevado el premio en esta categoría para limpiar la imagen de que ha repartido por igual. Mentira. Pucherazo. Felicidades Ozon.
3- El Premio al Mejor Director se lo han regalado a Javier Rebollo por su película La mujer sin piano. Me parece una rebollada hacer ésto. Es un insulto al cine. Es una falta de capacidad por parte del jurado premiar a este director con aires de grandeza y con baja autoestima que no ha demostrado maneras de direcciones superiores a otras en competición. Los favores se pagan. En fin. Todavía me acuerdo de su rueda de prensa. De algún modo, hay que financiar las arcas del cine patrio. Hay que cubrir los gastos del año. Pero es que así...Me siento ridículo. Más se tienen que sentir Mathias Glassner, François Ozon, Isaki Lacuesta, Aaron Schneider y sobretodo Campanella, quien ha resultado ser el sacrificado. Una rebollada en toda regla.
4-La Concha de Plata a la Mejor Actriz ha ido a parar a Lola Dueñas por su interpretación en Yo, también. De nuevo barriendo para casa. Aunque no me disgusta. Es una actriz seria. Felicidades.
5-La Concha de Plata al Mejor Actor ha sido para Ricardo Darín. No, perdón, para Robert Duvall. No, perdón, para Pablo Pineda. Es que en el imaginario del jurado oficial no se premia la profesionalidad, el talento, la valía, el método, la trayectoria. Se premia por el chantaje emocional, se premia por pena. Por pena. Pineda no es actor. Nada tienen que ver sus méritos personales y profesionales con el cine. Una papeleta ganadora que huele a miedo. Este premio era de Ricardo Darín, quien ha venido a Donostia con dos películas con dos interpretaciones enormes. En su defecto, se lo hubiera dado a Robert Duvall que también desarrolla un gran papel. Me lo esperaba pero no quería aceptarlo. PUCHERAZO.
6-La Mejor Fotografía ha ido a parar también a la película china. Felicidades.
7-El premio al Mejor Guión se lo ha llevado Blessed. Felicidades.
Quiero felicitar especialmente y con mucho cariño al mejor director español de esta edición del Festival de San Sebastián: ISAKI LACUESTA. Se ha llevado el Premio FIPRESCI. Su película Los condenados es la mejor del panorama nacional. Algo fresco, transparente, que crea un debate de verdad, auténtico debate y cine. Sobretodo cine. Felicidades. Tú representas la identidad del cine nacional que queremos muchos de nosotros. Gracias.
Me voy triste y decepcionado. Porque no ha ganado el cine. Ha ganado Rebollo, el anticine, ha ganado Pineda, la antinterpretación. Este año no se ha premiado el cine. Se han premiado-financiado ciertos proyectos nacionales. El palmarés responde a intereses publicitarios y a premiar a los protegidos. Porque en estos tiempos de crisis hace falta que las salas se llenen y cuanto más morbo mejor. No le haceis ningún favor a este festival, señor jurado, teneis un imaginario y cuanto antes os desprendais de él mejor. Los que hemos estado mamando este festival sabemos que la oferta cinematográfica ha sido de buena factura. El problema es que se ha premiado lo más malo. Menuda rebollada. Un jurado que demuestra que muchos de sus componentes aún sigue pidiendo la paga a sus papás.
Un placer cubrir el Festival de San Sebastián. Un saludo desde lo más alto de un olmo.