Woody Allen sigue con su particular tour turístico: De aquí para allá por Europa, bien financiado por los ayuntamientos de turno, mas preocupados por las portadas derivadas de contar con el genio neoyorquino entre sus calles durante unos meses, que por la crisis que toque (cuando salgamos de esta ya nos meteremos en otra).
Quizá en esta relajada etapa de su carrera la calidad de sus películas sea lo de menos. Está claro que la etapa londinense no pudo empezar mejor, con Match point, pero luego todo ha ido derivando en un Allen de piloto automático que, no juguemos a adivinar (aunque es lo que debiera hacer siendo esta la web de las precríticas...), ya veremos si se mantendrá en su nueva incursión parisina: Midnight in Paris.
De momento nos lanzan un primer póster, un cartel promocional en el que el gusto de Allen por los museos (más que por la pintura) parece que tendrá de nuevo algo de espacio, si nos atenemos a esas (reconocibles y muy concretas) pinceladas de Van Gogh que enmarcan al Sena y a Owen Wilson.
Por cierto, ¿Wilson no os parece más Robert Redford que él mismo, en el poster? Y otro "por cierto": ¿En esa misma localización no bailaban Goldie Hawn y Allen en Todos dicen I love you? Una escena deliciosa, ¡grato recuerdo!