Mañana se estrena Presentimientos,
la segunda película de Santiago Tabernero. El director y la
protagonista, Marta Etura, se han acercado a Donosti, para
presentarla en los cines SADE.
Me ha costado ocho años hacer mi
segunda película.
La película está basada en la novela
homónima de Clara Sánchez. Tabernero, como viejo amigo de la
escritora, tuvo ocasión de leerla incluso antes de su publicación y
quedó prendado desde el principio. Le interesó especialmente que
hablara de una historia de amor con una apariencia de thriller. Ante
todo es una gran historia de amor. La llega a definir, creo que
con acierto, como un thriller romántico. También le llamó
la atención la estructura de la novela por su originalidad. Dos
líneas de realidad diferente además de una serie de flashbacks en
orden inverso.
Eduardo Noriega, coprotagonista,
también ha participado en el guión. Tabernero considera que los
actores aportan un punto de vista extraordinario en el guión
y que realizan una defensa del personaje. Han querido hacer
una adaptación muy libre. Trabajaron con el material original hasta
que concluyeron que habían llegado al corazón de lo que quiere
contar la historia. A partir de ahí continuaron de manera más
libre, sin tener tan en cuenta los detalles de la novela, cambiando
algunos personajes y situaciones para ser fieles a la esencia.
Considera que es un buen trabajo para ambos, para el actor y para el
guión. Dice que Noriega fue claro en su planteamiento: "voy a
pelear apasionadamente por mis ideas, pero en caso de empate la
decisión es tuya".
Estoy muy contento de estar en San
Sebastián, la ciudad de Marta. Se muestra además muy satisfecho
con el trabajo de la actriz. Se lamenta de que la mayor parte de las
historias están escritas por hombres y no hay buenos papeles largos
para las actrices. Se nota que esta historia está escrita por una
mujer, en referencia a la novelista. Etura afirma que ha sido un
reto interpretativo para ella. También dice estar contenta con el
director pues está abierto a aportes. A pesar de que ella, al
contrario que su compañero de interpretación, no ha participado en
el guión, dice no sentirse en desventaja por ello. Una vez que
empiezas a rodar, trabajas en equipo.
Se habla también de las dificultades
de la industria. Me ha costado 8 años hacer mi segunda película.
Aunque apunta que, en general, dirigir la segunda es más difícil
que la primera. Además, tampoco tenía ansiedad por volver a dirigir
porque estaba haciendo cosas que le gustaban, con sus realizaciones
en programas de televisión. Se lamenta de lo difícil que es, no ya
hacer la película, sino darle visibilidad. Explica como en el
estreno de Madrid, ante un cartel enorme de El lobo de Wall
Street, se le bajaron los humos. En ese sentido, la actriz
comenta que no deberíamos comparar con la industria norteamericana,
que es un gigante. Es absurdo compararse, es injusto. Nuestra
sociedad tiene que aprender a valorar lo suyo. Tiene la sensación
de que aquí lo único que se valora es el deporte y defiende que la
cultura da muchos valores.
El director se muestra pesimista con la
situación de las salas de cine y cree que iniciativas como la
reciente de los miércoles al cine son los últimos coletazos de
una industria que va a desaparecer. Considera que Internet y la
calidad de las televisiones de hoy en día harán que muchos estrenos
de autor terminen estrenándose online. También se lamenta de que
el hecho de que una televisión tenga los derechos de antena de una
película -en este caso TVE- hace que el resto deje de informar sobre
ella. Cuestión que también lleva al caso del deporte, y cita como
ejemplo la Fórmula 1. En su opinión, no se debería dejar de
informar por estos intereses.