El coreano Park Chan-wook, realizador de títulos como Spathy for lady vengance u Oldboy, rueda por primera vez en Estados Unidos. El resultado, una ambientación escalofriantemente cuidada al servicio de una historia de terror psicológica.
Isabel Coixet ahonda en profundidad en una pareja rota. Bella pero densa, dónde los sentimientos ahogan, las escenas comparten una cuidada estética con una desesperada estática. Una amalgama de sensaciones, dominadas por una inconmensurable Candela Peña.
Basada en los hechos reales ocurridos en Génova en el 2001, durante la conferencia del G8 y el desalojo forzoso de unos estudiantes en la escuela Diaz. Una película dura y violenta, que no esconde nada de la crueldad de los hechos que se denunciaron.
Comedia estadounidense al uso, con la típica boda de fondo y los interminables enredos. Su único aliciente, la presencia de nombres como Diane Keaton, Robert De Niro, Susan Sarandon o Robin Williams.