Laurent Cantet asiste a la rueda de prensa junto con dos de sus jóvenes actrices protagonistas del film Foxfire.
En la corta rueda de prensa una de las primeras preguntas es para el director sobre el carácter continuista o de ruptura de su film con respeto al resto de sus películas hasta el momento. Cantet nos habla de continuidad, comenta que tiene una sensación de intento de ver las cosas tal y como son, es un estilo diferente, de época, en EEUU, pero con las mismas preocupaciones, personajes que tengan espacio y situaciones que se desarrollen. El rodaje ha sido en libertad, escenas con continuidad respetando la energía de los actores. Muy parecido a su forma de filmar en La clase. La adolescencia es un momento decisivo y una segunda película era necesaria.
Continuando con el film explica que fue pensada en conectar la relación de los años 50 y el hoy. Tenía ganas de mezclar las épocas, respetando los decorados pero rodando de forma actual, con música de época pero muy contemporánea. La idea era dejarla fuera del tiempo. Sigue existiendo hoy la violencia machista, la agresión a la gente de medos más bajos. Mi cine consiste en mirar los problemas de la sociedad.
Sobre el espíritu rebelde que puede estar resurgiendo en Francia o en el mundo comenta que cree que desde siempre el cine refleja la sociedad. Ahora asistimos a un regreso de la política al cine. La necesidad de una sociedad que tiene que pensarse a sí misma y el cine participa en eso.
Una de las últimas preguntas versan sobre esos años 50 de los Estados Unidos. Laurent Cantet nos dice que la novela le indica que debe empezar allí, EEUU tenía ese sueño americano tan ideal y ver el sentir comunista de las chicas en un país con esa doctrina prohibida es perfecto en esa época.