Rueda de prensa de Hijos de los hombres

Zinemaldia > Hijos de los hombres > Rueda de prensa

Gran expectación por la llegada de Clive Owen y Alfonso Cuarón. Una sala llena hasta arriba de fotógrafos y periodistas. Entran los dos con su vaso en la mano. Owen tranquilo, elegante. Cuarón algo nervioso en su hablar y de aspecto más bohemio. La rueda de prensa dura cerca de una hora en la que se dicen muchas cosas. Vaya aquí mi resumen.

No tuve ninguna imposición
Al igual que hace poco comentaba su compatriota Iñárritu, Cuarón afirma que que no ha tenido ningún tipo de imposición en la película. “Nadie nos manda hacer cosas”. Hizo la película tal y como la quería. Aun así, explica que el propio Owen, le ayudó a rescribir su personaje. Sobre eso Owen comenta que no quería buscar su lucimiento como actor sino colaborar con Cuarón para hacer un personaje más creíble. El director confiesa que le gusta retocar el guión con los actores para hacer que las palabras cobren verdadera vida. En cuanto al final, dice haber pedido la opinión a Iñárritu, quien le convenció para que el final fuera el que ha sido. Dice de él que es más intuitivo, “yo necesito más los libros, me cuesta trabajar con mis instintos”. En general dice sentirse afortunado, y como él lo son Iñárritu y Guillermo del Toro. Asegura que la libertad la peleas, y define a Hollywood como una fábrica de calcetines, que tiene sus propios directores para hacer sus productos. (Suena el móvil del periodista) Cuarón bromea y asegura que es Hollywood que llama para que le regañe. También bromea cuando le preguntan por una escena de parto (muy realista) y explica que contrataron a una actriz dispuesta a quedarse embarazada. “Un día lo intentamos y no salió el bebé”. Respecto a sus colegas mejicanos dice que su película la considera como el cierre a una trilogía iniciada por Iñárritu con “Babel” y por del Toro con “El laberinto del fauno”.

No veo jodido el futuro, veo jodido el presente.
La película, que está ambientada 20 años en el futuro, habla de los problemas de hoy, la inmigración, el terrorismo, el medio ambiente. Quiere ser un aviso de hacia donde nos dirigimos. Tanto el director como el actor coinciden en que esta no es una película pesimista. La película, dice Cuarón está llena de humanidad y habla acerca de la esperanza. “No creo que el cine pueda cambiar nada, pero puede influenciar”. Para Owen es más fácil trabajar en una película que trata de cosas importantes, aunque apunta que el cine perfectamente puede ser mero entretenimiento. Sobre eso el director asegura que una comedia que verdaderamente te haga reír puede salvarte de horas de terapia. Quiere encontrar la manera de hacer reír al público en próximos trabajos.

No quería coches voladores.
En cuanto a la ambientación futurista, se le mostraron diseños de coches voladores y cosas por el estilo pero no era lo que él quería. Para construir la imagen que buscaba se basó en Irak, Sarajevo, Irlanda del Norte... Todo debía hacer una referencia al presente. Comenta como ejemplo los coches. Debían ser nuevos, que no se hayan visto pues era una película ambientada en el futuro, pero a la vez quería que el espectador se sintiese como en un coche actual.
Por otro lado está el tema de la ambientación británica, para lo cual se dejó ayudar por los actores. Busca la identidad británica. Usa una banda sonora únicamente británica. La película está ambientada en Londres para empezar por la novela, pero también porque Cuarón quería el concepto de Isla.

Un personaje alejado de los clichés
Owen insiste varias veces en que su personaje en la película escapa del cliché habitual de héroe. Un personaje que Cuarón define de arquetipo de Moisés aunque no es una imagen teológica. Para Owen, Theo es una puerta abierta al mundo del futuro que el espectador debe conocer, de ahí su aparición en la mayoría de los planos. “Sabía que iba a ser agobiante”. Su personaje, dice, es muy raro. No le importa llevar chancletas en determinado momento de la película, “son muy cool”. Eso le gusta porque uno sabe que un personaje no puede salvar el mundo en chancletas. El director está contento con su reparto. Dice haber escrito una carta a los santos reyes y haber obtenido los regalos.

Su estilo
Preguntado por su propio estilo, Cuarón explica que quería buscar un acercamiento similar al de “Y tu mamá también” con planos abiertos y planos secuencia, con situaciones en tiempo real. Quería rodar “La batalla de Argel” en el futuro.