Twitteando twitteando andaba yo vagueando y, hete aquí, que doy con unas declaraciones de lo más peculiares, obra de Sean Penn, a través del twitter de SensaCine. Me llaman la atención y me lanzo a buscar más info en diferentes fuentes de la red.
Y sí. Son bastante peculiares. Básicamente Penn asegura que El árbol de la vida, película de Terrence Malick que recibirá el Fipresci en el Zinemaldi, Palma de Oro en Cannes y que tan buenas críticas está obteniendo, "no se entiende". O más estrictamente, "no entiendo la película".
Penn explica que le maravilló el guión ("el mejor que he leído en mi vida") pero cree que la traslación a imágenes no es la correcta: "Una narración más transparente y convencional habría beneficiado a la película". Lo que es peor, el viejo Sean dice que no entiende muy bien qué pinta él en la película tal y como ha sido terminada. Ignora "qué aporta". "Más que nada -dice- porque Terry nunca se molestó en explicármelo con claridad". En fin.
Peleas de este tipo, o este tipo de disgustos a posteriori, no son nuevos. Mel Gibson ya puso a parir Million dollar hotel, de la que dijo que era "aburrida". Y Daniel Craig aseguró recientemente que, tras ver un primer montaje de The girl with the dragon tattoo, creía que Fincher se había pasado con las escenas de violencia explícita.
Hollywood, un ring de egos. En cualquier caso, aquí seguimos esperando para disfrutar de lo nuevo de Malick, pero queda poco. La veremos en el Festival de San Sebastián y os contaremos de qué lado nos ponemos.