Era el taxista que llevaba al Serpiente por la carcelaria Manhattan de Rescate en Nueva York. Estuvo también en Doce del patíbulo, y fue uno más del Grupo Salvaje. Y se llevó el Oscar a casa por su participación en Marty.
Su rostro es el de uno de esos grandísimos secundarios de Hollywood, un rostro ancho y capaz, tan propicio para una afabilidad que desarmaba como para cargar las pilas al más pintado con la mirada más peligrosa y ...
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