Comer alpiste puede ser la mayor representación del hambre. De esto va, al menos en primera lectura, Boy Eating the Bird's Food, la ópera prima del griego Ektoras Lygizos. De pasar hambre, de no tener nada, de la pobreza a niveles extremos que, desgraciadamente, no es una exageración en Grecia, como no lo es ya tampoco aquí.
Ya tenemos claro cuáles son las claves del nuevo cine griego, principalmente asentadas por Yorgos Lanthimos (Canino, Alps) quien, por c...
leer más...