Un chalet madrileño ha sido la localización secreta elegida por que Antonio Banderas para recluirse durante este mes de agosto, a fin de apurar el montaje de su nueva película como director, El camino de los ingleses. Banderas maneja un material de hasta 120.000 metros de película, con el que tendrá que dar la forma definitiva a esta adaptación de la novela de Antonio Soler.