Un giorno perfetto ha sido hoy la primera película italiana proyectada en la Sección Oficial de la Mostra de Venecia. El resultado no podía ser peor: gran parte de la crítica especializada ha criticado duramente el film y, sobre todo, a la organización del Festival, acusándolo de dejarse llevar "por el nacionalismo y no por la calidad" a la hora de elegir las películas que participarán a concurso.
Recordemos que este año son cuatro las películas que se proyectan en la Sección Oficial. Desde la Mostra, la explicación no puede ser menos satisfactoria: Hay tantos títulos italianos porque, en años anteriores, se les criticó precisamente por su asuencia. De momento, este primer film, del italiano con orígenes turcos Ferzan Özpetek, ha sido vapuleado por la crítica, salvo escasísimas excepciones.
También se ha podido ver en Venecia a lo largo de la jornada la película china Dangkou, que ha dejado algo fría a la audiencia con un trabajo que, de nuevo, se acerca más al video-arte que al Cine.
Vinyan ha sido el otro título del día, película del director belga Fabrice Du Welz, y que se centra en el terrible tsunami que asoló Tailandia en 2004. Este film ha servido para aportar la presencia glamourosa de rigor, con la actriz francesa Emmanuelle Beart.