El mundo del cine permanece de luto por la muerte de uno de sus grandes, uno de los grandes precursores de muchos cambios en la gran industria de Hollywood, uno de los malos de siempre, Dennis Hopper. La causa de la muerte es un cáncer de próstata que acaba con la vida del actor a la edad de 74 años.
Ya el pasado otoño anunció su enfermedad y su fin ha llegado en su morada de Venice, California, tratándose de un adiós muy duro para una generación que relacionará al personaje de Easy Rider con este genial actor siempre polémico pero muy amado por fans de todo el mundo. Descanse en paz.