Parece que Quentin Tarantino, tras el rodaje de Grindhouse, retorna a su vieja idea de Inglorious bastards, esa suerte de "El bueno, el feo y el malo pero en la Segunda Guerra Mundial", tal y como el propio director definió.
El último rumor acerca del proyecto señala que el resucitado Sylvester Stallone podría estar en conversaciones con Tarantino para dar vida a uno de los tres protagonistas de la película. Lo cierto es que ya en su momento se comentó que el realizador quería a Stallone, Bruce Willis y Schwarzenegger para el rodaje, pero dadas la actual dedicación profesional de este último, esa idea se presenta complicada.
Pero una cosa no quita la otra, y si hemos de hacer cosa a los mentideros hollywoodienses, Stallone, de momento, podría contar para Tarantino.